Miksa Déri – uno de los padres de la red eléctrica moderna
Miksa Déri – uno de los padres de la red eléctrica moderna
Miksa Déri – uno de los padres de la red eléctrica moderna
Las fuentes dan diferentes cumpleaños del próximo inventor, cuyo perfil queremos presentar. Algunos dicen el 24 de octubre, otros indican el 27 de octubre, pero es cierto que este destacado ingeniero nació en 1854 en el condado húngaro de Bács-Kiskun, en el seno de una familia de comerciantes. La finca familiar le permitió estudiar ingeniería civil en la Universidad Politécnica de Budapest y más tarde en Viena. En años posteriores, continuó su educación en el campo de la ingeniería eléctrica. Ya al comienzo de su carrera, participó en el ambicioso proyecto de planes de regulación del Danubio y el Tisza. En 1882 se incorporó a la empresa Ganz, asumiendo el cargo de director de fábrica. Ganz, más tarde conocida como MAVAG, es una marca reconocida en los países del antiguo bloque del este donde se utilizaban los autobuses Ikarus.
Fue en esta compañía donde Déri conoció a los co-creadores de sus mayores logros, fueron Károly Zipernowsky y Ottó Bláthy. Junto con el primero, Déri desarrolló el primer gran invento, que fue un alternador. Fue el primer paso en el camino hacia la creación del dispositivo ZBD (el nombre es un acrónimo de los nombres de los creadores) y un verdadero avance en la ingeniería eléctrica de esa época. ZBD es un transformador que permitió la transmisión eficiente de electricidad a largas distancias. Su eficiencia fue del 98% y se utilizó para construir la primera planta de energía con un generador de CA. Los ingenieros de Ganz presentaron sus logros en la Exposición Mundial de París, donde recibieron el Gran Premio. Fue la misma edición de la Exposición durante la cual se construyó la Torre Eiffel en la capital de Francia.
Gracias a ZBD, Déri pudo extender sus alas. Primero, participó en la construcción de una central eléctrica en Viena y tres años después, en 1892, valiéndose de su experiencia en ingeniería del interior, participó en la construcción de la central hidroeléctrica de Tivoli y la línea de transmisión que abastecía de electricidad a Roma. La invención también aceleró la electrificación de, entre otros Milán o Fráncfort del Meno. Déri también continuó su trabajo de investigación, desarrollando y mejorando modelos de motores eléctricos, incluido, p.ej., un motor de repulsión monofásico.
El trabajo de investigación del científico húngaro contribuyó a la construcción de una red energética estable en Europa (y no solo). Hoy en día es difícil imaginar una industria independiente de las fuentes de energía con parámetros estrictamente definidos. Para monitorear la calidad de la energía se utiliza en una serie de dispositivos dedicados y medidores, que aseguran el funcionamiento eficiente de líneas enteras de producción. La acción de muchos componentes de automatización depende estrictamente del voltaje o frecuencia dados. Los valores predecibles de estos parámetros permiten construir relés precisos e inversores, motor más eficiente, y también mejoran la seguridad en los lugares de trabajo. También utilizan las soluciones desarrolladas por el húngaro los generadores móviles (agregados).
Miksa Déri no fue el único ni el primer inventor cuyo trabajo abrió el camino a la electrificación universal para la humanidad. En nuestra serie, ya hemos mencionado figuras similares del mundo de la ciencia y la industria, por ejemplo Michał Doliwo-Dobrowolski. Pero ¿acaso esto disminuye los logros del húngaro de alguna manera? ¡Por supuesto que no! Ciertamente hay competencia en la ciencia y la invención, e incluso algo de competición, pero es un deporte tan extraño en el que toda la humanidad usa la camiseta de líder.

